Desde hace ya tiempo venimos observando que los
medios de comunicación solo atendían a dos cosas. La primera a influir políticamente
en beneficio de su ideario político sin tener ningún rubor. La segunda parte,
viene de la primera, la financiación a través de la información y divulgación
de programas basado en la vida de gente sin ninguna transcendencia para el
conjunto de la ciudadanía, pero que contribuyen a embrutecer a la población, despojándola
de cualquier interés por lo realmente importante.
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| La información debe volar. |
Afortunadamente algunas veces todavía nos
sorprendemos con periodistas que se dedican a la investigación de las cosas
importantes para la sociedad, y de esas sorpresas ha sido conocer los llamados
papeles de Panamá. Seguro que tramas como esta o parecidas habrá más, no
perdamos la esperanza de que los periodistas que se dedican a la investigación
seria nos informen de más casos de corrupción.
La labor de los periodistas tienen es conseguir
que quienes nos roban lo tengan más difícil, ya que muchos de quienes lo hacen
manejan los poderes políticos.
La información como elemento de presión para
evitar la corrupción debe contar con el apoyo de la ciudadanía. El valor de la
información debe servir para exigir a los poderes políticos que acabe de una
vez con los paraísos fiscales.
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